Servidores públicos pueden ser denominados diferentes grupos de personas: funcionarios, altos cargos, cuerpos y fuerzas de seguridad, ordenanzas, docentes… Todas esas responsabilidades, unas del funcionariado y otras por elección directa, necesitan de unos requisitos que aseguren la competencia y diligencia de la persona en el cargo. Por ejemplo, para ser Policía Nacional debes pasar varias pruebas diferentes: capacidades físicas, conocimientos teóricos, entrevista personal, test psicotécnicos y reconocimiento médico; además, en cualquier momento del proceso se pueden hacer test de drogas, ¿imaginan poder hacer esto con la clase política regional?
En las últimas elecciones regionales, las candidaturas autonómicas no despertaron mucho entusiasmo entre el electorado. El sector que salió a votar en masa lo hizo en contra de una figura política nacional y, ni aún así, se logro mayoría absoluta por parte de ninguna candidatura. Hubo más de un 33% de abstención y en torno a un 2,3% de votos en blanco o nulos, lo que eleva a más del 35% los votos no contabilizados para ninguna candidatura.
La Región de Murcia es un territorio con muchísimas CRISIS: sociales (desigualdades crecientes entre distintos sectores), económica (gran parte de la población en umbral de pobreza), laboral (elevada tasa de paro), sanitaria (enormes listas de espera), política (falta de liderazgo), moral o de valores (sector de juegos y prostíbulos al alza), educativa (faltan centros educativos públicos en todos los niveles), universitaria (déficit de presupuesto para las universidades), medioambiental (Mar Menor, sequía, contaminación) … y podría seguir desarrollando, pero no quiero aburrirles.
Tanta problemática y de tal calado requieren de un liderazgo creíble que centre su atención diaria en las casuísticas regionales con la gestión de los recursos disponibles. Nunca es una opción pasarte horas, días o semanas criticando a Madrid, Cataluña o Europa en redes o en televisión mientras ocupas a decenas o cientos de enchufados de tu parroquia (partido) cobrando miles de euros al año en asesorías.
Cientos de ciudadanos de la Región podrían aspirar a ser candidatos a Presidente/Presidenta o Alcaldesa/Alcalde. Quién ocupe un alto cargo ha de estar a la altura de esa responsabilidad, sin escudarse en el buenismo ni en estrategias de comunicación para suplantar enormes carencias y fallos en la compostura por no tener la necesaria preparación para representarnos.
En esta tierra, envidiamos perfiles de dirigentes que son reconocidos internacionalmente por ser gestores con una alta preparación. Personas educadas, bien formadas, hablan varios idiomas, visten y se comportan de una manera correcta, tienen experiencia en gestión (no de “enchufes políticos” facilitados por sus partidos en instituciones públicas/privadas) y su sola presencia impone respeto para representar al país o la institución. Emmanuel Macron en Francia, Jacinda Ardern en Nueva Zelanda o Justin Trudeau en Canadá son clara muestra de ello, ¿por qué en la Región de Murcia no podemos tener a alguien así ya: preparación, presencia, educación, inteligencia, locuacidad, proyección, liderazgo, cordialidad, resultados?
Hablamos de “altura de miras” para referirnos a que cualquier gestión no se limita a lo que tiene “delante aquí y ahora”, sino a lo que está por venir. Liderar una comunidad o un país implica tomar decisiones (a veces difíciles e impopulares) con alcance y repercusión en el futuro. Gestionar es dar futuro a las personas y entidades a tu cargo, planificar con dedicación y anticipar situaciones de crisis para sobrellevarlas. Con buenas políticas y programas eficaces de gestión puedes planificar: un decenio en una Universidad Pública, el número de colegios que vas a construir el próximo lustro o cuántos centros de salud se necesitan en 3 años en cada área; por poner unos ejemplos. Gestión, ¡Cómo te necesitamos!
Acuda a Twitter (X) u otra red social de cualquier alto cargo murciano (consejero, presidente, diputado, senador) y analice sus últimas 50 publicaciones ¿cuántas sirven para mejorar la vida de la población de la Región? ¿cuántas aportan soluciones/ideas/propuestas para nuestros enquistados problemas?
Todavía es peor cuando involucionamos porque deshacen legislación funcionando según estándares democráticos:
- Una ley del Presidente limitando a dos mandatos (8 años máximo) por persona, como garantía democrática de alternancia y regeneración. La han revertido y aquí podremos tener un Chávez o Berlusconi toda una vida ¡sin merecerlo!
- La Ley del Mar Menor, que lleva apenas cuatro años en marcha, no ha conseguido el cese de vertidos de nitratos y otras sustancias al Mar Menor. Pues ya maquinan su reversión ¡sin fundamento y por cuatro “puñaos” de votos!
- El medio ambiente está tan castigado en la Región de Murcia que nos da noticias diarias de su degradación… pues varias normas simplifican construir o hacer empresas a costa de él.
El dinamismo para la CARM sólo puede venir de un líder o lideresa de peso (político y gestor) al frente. Es hora de que las sucesiones no se hagan a dedo, sino de que haya primarias en todos los espacios posibles de gestión. Contar con personas muy válidas como Patricia Fernández, Marcos Ortuño, Ginés Ruiz Maciá, María Marín, María José Ros, Juanjo Molina, …de distinto espectro político. Cualquiera de ellos podría estar al frente de una Región del siglo XXI, es triste conformarnos con menos. Lamentablemente, muchos han sido relegados a segundo plano por enfrentamientos dentro de sus partidos.
Si todos los partidos presentes en la comunidad autónoma deben hacer una gran autocrítica, todavía mayor debe ser en las filiales regionales de los dos mayoritarios de ámbito nacional, ¿tenéis a las personas más válidas y preparadas en vuestra candidatura para dirigir la Región o como diputados para proponer leyes en la Asamblea? Os presuponen ser el Madrid y el Barça de la política regional, ¿por qué parecéis el FC Crevillent y el Reus CF? Hay mucho que mejorar ¿por qué el Senado y el Congreso son un cementerio de elefantes para ustedes en lugar de enviar a miembros proactivos, jóvenes a curtirse y perfiles especializados? La relevancia en Las Cortes la determinarán las personas que llevemos, las propuestas que se hagan y la educación con la que las realicemos. Jugando al ping pong de la descalificación y el “y tú más”, no conseguimos ninguna prosperidad.
Vuestra cantera política (generaciones o juventudes) puede estar formada por chavales recién salidos de una carrera, pero no están capacitados para ser concejales o diputados sin un mínimo de experiencia laboral o vital ni sin completar sus estudios, ¿qué clase de premio político es darles un suelo de miles de euros del erario sin justificación para ello? Esto también ocurre aquí en la Región, terrible.
Finalmente, si eres un cargo público, político o un “servidor” estás expuesto a continuas evaluaciones y opiniones, porque de esto va la Democracia. Si cometes graves errores, dimites; si tu comportamiento no es correcto, dimites; si no soluciones los problemas eternizados y no estás preparado para seguir, dimites; si no tienes liderazgo, dimites. En esta Región, casi nadie critica por miedo y ¡no les falta razón!: distintas personas han perdido su trabajo o se han tenido que marchar por hacerlo, ¡vaya “Democracia”! ¿verdad?
Esta Región de Murcia necesita un buen lavado a fondo de cabezas y de ideas, despolitizar y volver a darse cuenta de qué es LO ESENCIAL para conseguir en ciudades, provincia y administración con mejor calidad de vida para sus ciudadanos. Es lamentable estar discutiendo si “se puede salir de fiesta” siendo un cargo político, pero peor aún es que se repita lo mismo cada tres meses porque nadie aprende sobre lo que SE PUEDE HACER y lo que no SE DEBE HACER delante de cientos de personas cuando representas a algo más que a ti mismo.
Dirigir y gobernar no es hacerte fotos liberando tortugas o linces, no es vestirte de agricultor para acallar críticas, no es ir a cenas de militantes a gritar “¿cómo están ustedes?”, no es acudir a fiestas patronales, ni intentar ser tertuliano en la televisión a diario. Las zonas de sacrificio y los territorios en crisis como “nuestra casa” necesitan líderes las 24 horas del día, dispuestos y disponibles, siendo consciente de lo que implica un cargo público: eres la imagen de todo un territorio hasta que te echen. Por nadie pase.
