La multinacional G’s España dedicada al cultivo de hortalizas, raíces y tubérculos en el Campo de Cartagena para exportación deberá pagar una multa de 1,1 millones de euros por verter 1,9 millones de metros cúbicos de salmuera con nitratos sin depurar al Mar Menor, el equivalente a 767 piscinas olímpicas, entre los años 2012 y 2016. Los vertidos procedían de dos instalaciones desalobradoras ilegales situadas en Torre Pacheco. El coste medio de reparación es de 0,57 céntimos/ m3 de salmuera.
Eso propone la Consejería de Medio Ambiente que debe pagar para resarcir el daño causado al ecosistema en concepto de responsabilidad ambiental. A esa cifra hay que sumar 2.974,15 euros euros por las obras que debió realizar la Confederación Hidrográfica del Segura para la clausura de los pozos, las desalobradoras ilegales y las conducciones. La Comunidad Autónoma ha rechazado las alegaciones presentadas por las mercantiles.
Daño ambiental agudo al Mar Menor
En su propuesta de sanción, la Consejería de Medio Ambiente subraya que las entrada de salmueras al Mar Menor procedente del funcionamiento de las desalobradoras precintadas, ha conllevado según los datos manejados, la entrada de 1.126 toneladas de nitratos al Mar Menor entre los años 2012 a 2017 (5 años y medio), lo que supone una cantidad anual aproximada de 205 toneladas de nitratos.
Se estima, según el Informe Integral del Comité de Asesoramiento Científico (2017) que la cantidad anual de nitratos que podría estar entrando al Mar Menor oscila entre 700 y las 1600 toneladas, por lo que la entrada anual de nitratos procedente de las desalobradoras objeto de denuncia podrían haber supuesto entre el 13% y el 29% de los nitratos que anualmente han entrado al Mar Menor.
El daño medioambiental producido dada la cantidad de nitratos estimada que forman parte de las salmueras y el porcentaje de esta cantidad respecto al total de nitratos que según el Informe del Comité de Asesoramiento Científico, entra anualmente al Mar Menor, es sin duda significativo y ha contribuido a que el Mar Menor alcance los actuales niveles ecológicos, si bien hay que indicar que este estado actual es la suma también de otros muchos impactos consecuencia de numerosas actividades que se desarrollan en el entorno del Mar Menor. Este deterioro global ocasionado al estado ecológico del Mar Menor ha sido calificado en el Informe del IEO (Instituto Nacional de Oceanografía) como SEVERO .
En cuanto a la cantidad vertida de manera individual por los distintos operadores responsables, se establece que la intensidad del daño realizado por G’S ESPAÑA HOLDINGS, SL Y G’S ESPAÑA SLU, (…..) se puede considerar AGUDA, debido a su actividad ha constituido un 19%,(….) del total de nitratos que han entrado al Mar Menor del total de las desalobradoras precintadas, lo que se ha calificado además como una infracción muy grave respecto a la Ley 42/2007.
En este punto Medio Ambiente recuerda que el IEO en su Informe (2020) comenta la evolución de la concentración declorofila superficial del Mar Menor, que en los años 80 no superaba 1 mg/m3 y a partir de 2012 se empiezan a encontrar valores máximos de 20 mg/m3 (más de 100 veces por encima de valores que se pueden considerar normales).
En el intervalo 2014-2018, la tasa de incremento aumenta significativamente hasta alcanzar 14,5mg/m3 por década. Esta concentración de clorofila está directamente relacionada con el incremento de nutrientes en la masa de agua, entre los que se encuentran los nitratos. El daño temporal ocasionado por la presencia de nitratos es muy dilatada en el tiempo puesto que su persistencia en el ecosistema es elevada.
Cómo se generó el daño ambiental
Según los atestados de la Guardia Civil, G’S ESPAÑA HOLDING SL Y G’S ESPAÑA SL eran poseedoras en las fechas de las actuaciones de investigación de un total de 8 y 67 parcelas, respectivamente, en el sector oriental del Campo de Cartagena.
G’S ESPAÑA, SL es usuario/regante de Comunidad de Regantes del Campo de Cartagena de la parcela en la que se encuentra la nave con las dos instalaciones desalobradoras, sin autorización de CHS, pero las dos desalobradoras daban riego tanto a parcelas agrarias de las cuales es usuario/regante la mercantil G’S ESPAÑA HOLDING, SL, como a otras que corresponden a G’S ESPAÑA, SL.
Loas dos instalaciones desalobradoras eran ilegales y se encontraban activas y en perfecto estado, en una nave situada en el polígono 18, parcela 0437 del t.m. de Torre Pacheco, con una capacidad cada una, respectivamente, de 1.900 y 1.000 m3/día. Se construyeron en el año 2007 y estaban funcionando periódicamente, según comprobación que hizo el Seprona en febrero de 2017. Tras captar agua de sus pozos expulsaban un rechazo de salmuera con nitratos sin depurar por el salmuero-conducto dirección a la rambla del Albujón y de ahí al Mar Menor.
Según el perito designado por Fiscalía, ambas mercantiles eran poseedoras de 436 hectáreas con unas necesidades de agua de unos 5,500 m3/ha al año, por aguas bombeadas de sus pozos, que exceden de la dotación del trasvase Tajo-Segura. Eso produjo un rechazo de salmuera con nitratos sin depurar de 1.917.768 m3 (767 piscinas olímpicas) entre los años 2012-2016.
Tras la sequía de 1995, la puesta en marcha de plantas desalobradoras de aguas subterráneas inició el vertido de salmueras con altas concentraciones de nutrientes. Estos residuos terminaban en la red de drenaje y en el acuífero Cuaternario, que recibía la recarga por retornos de riego en las áreas de cultivo, además de transportarse hacia los acuíferos confinados profundos”.
Son patronos de la negacionista Fundación Ingenio
G’s España es otra de las empresas patronas de la Fundación Ingenio que niega que los vertidos de nitratos sean la principal causa de la eutrofización que sufre el Mar Menor y persiguen la modificación de la Ley 3/2020 de 27 de julio.
La Fundación Ingenio contó al principio con total apoyo del Gobierno de López Miras. «Vosotros sois los buenos» llegó a decir el jefe del Ejecutivo regional hasta que, en octubre de 2022, la Fundación Ingenio emitió una nota de prensa titulada: «El campo de Murcia se moviliza contra López Miras» tras reunir en un salón de Torre Pacheco a cientos de agricultores del Campo de Cartagena a los que convencieron de la inexistencia de nitratos en el Mar Menor y animaron a presentar una demanda colectiva contra la Ley del Mar Menor de 2020.
La CARM fue obligada por el TSJ a exigir responsabilidad ambiental a las empresas contaminadoras
El TSJ obligó a la Comunidad Autónoma a exigir responsabilidad medioambiental a explotaciones agrícolas por vertidos al Mar Menor. Tras una denuncia de Fiscalía contra el Gobierno regional de López Miras, el TSJ sentenció en marzo de 2022 que debía iniciar procedimientos contra ocho empresas y particulares por aportación de exceso de nutrientes o rechazos procedentes de la extracción de aguas de los acuíferos, relacionadas con el atestado que dio origen a la instrucción del caso Topillo.
La Sala de lo Contenciosa estimó parcialmente el recurso presentado por la Fiscalía contra la denegación de su reclamación a la Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente en mayo de 2020 por inactividad.
La CARM se opuso al entender que era competencia de la CHS, pero el TSJ lo dejó meridianamente claro: el artículo 114 de Ley de Costas atribuye a las comunidades autónomas la competencia que en materia de vertidos al mar tengan atribuidas en virtud de sus respectivos Estatutos. “Por tanto, la atribución de competencia en este caso a la Administración del Estado, y concretamente a la Confederación Hidrográfica del Segura, carece de fundamento legal alguno”, concluyó el tribunal en respuesta a la Comunidad Autónoma.